A menos dos delegados de la Xunta en Ourense, los de Industria y Vivenda -ambos del BNG-, reconocieron ayer que decidieron personalmente retirar la bandera española de los actos oficiales en los que tomaron posesión hace algunas semanas. Xosé Antón Jardón y Antucho Espinosa calificaron de anecdótica la circunstancia y aseguraron que no recibieron instrucciones de su partido. «Foi por salientar e afirmar, pero non un acto reivindicativo», especificó Espinosa.
La Voz de Galicia
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